¿Y SI VOY A TERAPIA?

Llega de nuevo septiembre y con él otra de estas épocas del año donde sentimos que empiezan nuevos ciclos. En este caso acaba el verano y vuelve la rutina con la famosa vuelta al cole. Durante estos momentos de empezar o retomar suelen surgir en nuestra cabeza diversas ideas sobre diferentes proyectos que quizás podemos comenzar, y una de ellas suele ser: ¿es mi momento para empezar a ir a terapia?

¿Te resulta familiar esta pregunta? ¿Aparece o ha aparecido por tu cabeza últimamente? Si es así, puede que ya tengas la respuesta y hayas decidido pedir cita para empezar tu propio proceso, puede que aún sientas dudas y no tengas clara tu decisión, o puede que sientas que aún no es tu momento.

En cualquiera de estos casos pueden surgir miedos o inquietudes. Por ello, desde Nara Psicología queremos ayudarte a tomar una decisión más consciente abordando algunos de los miedos o dudas que hayan podido aparecer.

Empezar un proceso terapéutico es una decisión muy importante que implica conectar con el malestar, reconocer que hay algo que no está funcionando, y que necesito ayuda para resolverlo. Así leído parece fácil, sin embargo, no lo es y puede despertarnos muchos miedos y dudas.

Primero, me atrevería a decir que a nadie nos gusta conectar con emociones desagradables y el malestar suele ir conectado a bastantes sensaciones de este tipo. Sin embargo, en terapia no lo harás en soledad, tu terapeuta te acompañará y te guiará durante el proceso para que de manera conjunta podáis ir gestionándolo.

Además, admitir que hay algo que no está funcionando es complicado y más cuando nos damos cuenta de que no podemos solucionarlo por nuestra cuenta. Cuando pedimos algo podemos sentir que el resultado ya no es tan valioso por tener que solicitarlo, o podemos sentirnos débiles por no poder resolverlo sin ayuda. Pero nada más lejos de la realidad, la respuesta va a seguir siendo valiosa porque va a darnos lo que buscábamos, y ser capaces de dar ese paso a pesar de nuestros miedos, nos hace valientes y nos acerca al bienestar.

Pero, ¿y si mi terapeuta me juzga? El espacio terapéutico es un entorno de seguridad donde tu terapeuta está para escucharte y aceptarte incondicionalmente. Aunque es importante que si no lo sientes así puedas comunicárselo para poder trabajar en ello.

O ¿si piensa que no tengo solución? El inicio de la terapia siempre consiste en un proceso de evaluación para conocer qué te está pasando y poder proponerte el trabajo más adecuado para ti. Si tu terapeuta ve que no puede ayudarte te lo comentará y te ayudará a buscar una persona que sí pueda hacerlo.

O ¿si no entiende mis creencias? Tus creencias son parte de ti, y tu terapeuta te aceptará sin evaluarlas ni juzgarlas, su trabajo consiste en acompañarte desde tu perspectiva vital.

Y si ¿no ha vivido lo que cuento? ¿Qué te preocupa de esto, quizás que no te entienda? Tus vivencias siempre van a ser únicas e independientes de las de otras personas, por lo que la clave reside en poder comprenderte y acompañarte desde tu propia experiencia, sin que otras formas de ver o vivir la realidad empañen lo que te pasa.

Estas son solo algunas de las dudas que pueden sobrevolar tu cabeza, en Nara Psicología creemos que los miedos y las dudas nos conectan con nuestro lado más humano, y afrontarlos nos llena de valentía. Si estás planteándote comenzar tu propio proceso terapéutico, en nuestro centro podemos acompañarte y acoger tus temores e inquietudes para que no supongan un obstáculo para tu proceso, mientras trabajamos en tu malestar.

Si decides empezar tu proceso terapéutico, no dudes en contactar con nosotras.

 

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Necesitas ayuda?