Hoy, 25 de noviembre, desde Nara Psicología queremos insistir y denunciar que la violencia de género es la mayor epidemia que siguen padeciendo las mujeres en todo el mundo.
Tan solo en nuestro país, según recogía la última Macroencuesta de Violencia contra la Mujer [1] en el 2019, “una de cada dos mujeres, el 57,3% de la población, de 16 o más años, había sufrido violencia a lo largo de sus vidas”. Nacer mujer, a día de hoy, sigue siendo un factor de riesgo en cualquier lugar.
La violencia de género es la violencia que sufren las mujeres por el mero hecho de ser mujeres. Es aquella violencia que ejercen los hombres, con o sin relaciones de afectividad, con el fin de producir daño y ejercer el control sobre las vidas y los cuerpos de las mujeres. No hay un perfil de mujeres víctimas de las violencias machistas pues la violencia de género es padecida por mujeres de distintos orígenes, estratos sociales y niveles educativos y económicos diferentes.
Entendemos como violencia machista no solo aquella violencia de género y malos tratos que se da en el ámbito de la pareja o la expareja, sino la violencia y el sometimiento cometido por los hombres hacia las mujeres en la que se pone en juego la voluntad, la integridad, la libertad y la seguridad de las mujeres independientemente de la relación que las mujeres guarden con el agresor.
La violencia contra las mujeres es un problema no solo estructural y político sino que conlleva graves secuelas físicas y psicológicas para las mujeres víctimas. Sentimientos como miedo, culpa, estados de hipervigilancia, aislamiento social, desconfianza hacia una misma y hacia las y los demás, depresión, ansiedad, sensaciones de poca valía y baja estima personal, problemas de autoimagen, pesadillas, irritabilidad o ideas suicidas son algunas de las consecuencias que se producen en mujeres que han estado en relaciones de maltrato o han sido víctimas de violencia sexual.
En los últimos tiempos los discursos que niegan la violencia de género, y las desigualdades en las que se siguen encontrando las mujeres hoy en día, no hacen más que poner de manifiesto la importancia de seguir reivindicando que el machismo mata y que el patriarcado sigue siendo uno de los factores que agrava la salud de las mujeres.
Por eso, nos parece importante, poner el foco en aquellos hombres que siguen siendo perpetradores de la violencia y cuestionar sus actos y discursos, y no en quienes la soportan que son las mujeres, niñas y niños. Para las supervivientes de las violencias machistas sigue siendo necesaria una política y unos recursos que garanticen la verdad, la justicia y la reparación del daño sufrido.
Nos queremos vivas, libres y sin miedo.
Laura Baños del Río. Psicoterapeuta en Nara Psicología.
[1] La Macroencuesta de Violencia contra la Mujer es la operación estadística más relevante que se realiza en España sobre violencia de género. Es la única estadística oficial para medir la prevalencia de las violencias contra las mujeres. Se realiza aproximadamente cada 4 años desde 1999 y está incluida en el Plan Estadístico Nacional.
La autoría pertenece a la Subdirección General de Sensibilización, Prevención y Estudios de la Violencia de Género (Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género).
Foto extraída de FEIM: Fundación para el Estudio e Investigación de la Mujer
